viernes, 24 de octubre de 2014

INSTITUCIONES DE FORMACIÓN SUPERIOR CENTRADAS EN PRINCIPIOS Y VALORES DEL NIÑO DE HOY, COMO LA ÉTICA DEL HOMBRE DEL MAÑANA



INSTITUCIONES DE FORMACIÓN SUPERIOR CENTRADAS EN PRINCIPIOS Y VALORES DEL NIÑO DE HOY, COMO LA ÉTICA DEL HOMBRE DEL MAÑANA
Por Rilda Molina Benavides

            La sociedad adquiere mayor importancia y necesidad de una conducta ética en la gestión de las universidades, conductas  que contribuyan a asumir prácticas morales en los  intereses que coexisten en el entorno académico, que este enfoque de la  organización de la universidad, asume un enfoque sustentado en la necesidad de los principios éticos como ordenadores del nuevo esquema que prevalezca en las instituciones con  resultados que señalan el papel  fundamental, que representa una nueva expresión de la forma de vida del universitario, lo cual resulta una responsabilidad ineludible. Proveer educación de calidad y el deber ético mas importante de cualquier institución es iluminar a los estudiantes, demostrar que la ética y la educación están emparentadas por sus fines, el crecimiento y el crecimiento pleno de las personas; también el quehacer esencial de la universidad es proporcionar un ambiente que favorezca el desarrollo y realización de todos sus integrantes y a través de ellos beneficiar a la sociedad en general.
            La ética universitaria muestra los medios y elementos más convenientes y los elementos que ayuden a la construcción de ese ambiente; la primera debiera ser su compromiso con la verdad y la justicia en el ejercicio del pensamiento. Se inicia con el problema de la verdad, de la legitimación del conocimiento para conocer esa verdad donde el educador abre las puertas que conducen al mundo de verdades. Para cualquier institución de educación superior será importante mostrar e iluminar a los estudiantes en el camino hacia los mas y mejores principios éticos y morales.
También necesario, difícil y arriesgado, porque los guardianes y constructores de las sombras , que se preocupan mas de la política que de formar personas con inteligencia libre cuartan el pensamiento con animosidad de poder, ese que se sustenta en el imperio de la dominación y la ignorancia.

            Algunos medios para la formación de esta conciencia ética en la universidad o estudios superiores es por la esencia del quehacer universitario, la evidencia intelectual que puede llegar a ser el medio más poderoso para práctica de la justicia institucional que forma hábitos, actitudes justas, mas si es una institución donde reina la razón.
            La Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia (CPE) en su capítulo sexto , sección II: Educación Superior art. 97 cita
“La formación post-gradual en sus diferentes niveles tendrá como misión fundamental la cualificación de profesionales en diferentes áreas, a través de procesos de investigación científica y generación de conocimientos vinculados con la realidad, para coadyuvar con el desarrollo integral de la sociedad. La formación post-gradual será coordinada por una instancia conformada por las universidades del sistema educativo, de acuerdo con la ley.”
Cuando se hace referencia que la formación post-gradual formara a profesionales cualificados, hablamos justamente de profesionales formados primera y esencialmente en códigos morales y éticos, tanto como personas que son parte de una sociedad como profesionales responsables de la formación de futuros estudiantes, es decir, que también se contara con la formación a nivel humano.
 Las universidades se debieran convertir en un lugar donde los estudiantes puedan encontrar los medios y oportunidades convenientes para su desarrollo personal en los planos intelectual, estético, espiritual y moral, donde los profesores investiguen, generen y comuniquen conocimientos, muestren caminos deseables con sus propias vidas, comuniquen a sus alumnos el placer del saber, pero también den posibilidades, académicas y culturales para crecer y proyectarse. Para esto es indispensable contar con funcionarios preparados que sean capaces de organizar, decidir, ordenar, innovar, gobernar, con interés por reflexionar y llevar adelante el destino de la institución con justicia social.
La CPE refiere a conocimientos vinculados con la realidad para el desarrollo integral de la sociedad, es decir, que también hace hincapié e una formación académica que está gobernada por criterios y lideres justos, que empiece con un gobierno ético de verdad y de acciones académicas que enseñen lo que es la vida, y denoten hacia la sociedad en la que está inmersa, que la formación en su seno está sustentada por un criterio de verdad, belleza, bondad, unidad humana y luz. Esta formación que se ha perdido y dejado de lado al pasar del tiempo no solo por intereses económicos, políticos o de poderes superiores, puesto que pocos educadores conservan la inminente intención de hacer lo adecuado y correcto para todos e general, antes de hacer lo conveniente para sí mismos.
Poder escudriñar en la base de este problema en cualquier entidad o institución  de formación educativa tanto como profesionales, como padres es entramarse en las raíces del problema que vienen desde la formación inicial de la ética y valor el valor de incluir estos puntos en el currículo de la educación básica o primaria.
El mejoramiento de la calidad de la Educación, es un reto en nuestro contexto ya que no se presta mayor importancia en niveles iníciales, aunque debemos asumirlo como un deber y un compromiso con el país, un gran reto que indiscutiblemente deberá asumir toda la sociedad que va a comprometer de una forma más particular y más directa a los maestros.
Para asumir y poder llevar a la práctica el gran reto de la mejora de nuestra calidad de enseñanza, lo primero que se necesita hacer, es conocer las propuestas formuladas por el Ministerio de Educación, y la nueva ley de educación N°70 y concretamente a través del Currículo Básico para ciclos iníciales y reflexionar sobre ellas, confrontándolas con nuestras experiencias y con los resultados que son los jóvenes que hoy por hoy son la muestra de que no están inmersos en temas abstractos como la ética.
La respuesta al reto que supone el fortalecimiento de la acción escolar como acción profundamente humana y humanizadora, con el concepto y un desarrollo curricular de los que llamamos de ejes transversales; que nos ayuden a tomar dimensiones básicas  sobre las que se profundizará por medio de la socialización.

La formación profesional debe diferenciarse de la educación profesional puesto que algunas de las causas para no obtenerla tanto a temprana edad como en formación superior es justamente su desconocimiento, como  la poca capacidad y autonomía personal en la institución escolar para auto renovarse y la carencia de una fuerza social que exija, promueva y contribuya a esta renovación.
En respuesta a este reto y en la búsqueda de una mayor eficiencia y calidad de la práctica educativa, se requiere un plan de acción en el cual prime la palabra reestructuración con un significado de transformación total, desde las bases de la educación escolar inicial primaria,  hasta la educación superior.
El deterioro de la educación, sigue siendo a causa no de las leyes, ni planificaciones nuevas sino de la mala aplicabilidad de estas. Teniendo en cuenta que por mas optima que sea la norma o el currículo no se conseguirán resultados si la aplicación de ellas no es viable y sustentable. Razón por la cual para ver tangibles resultados debiéramos centrarnos en formar en valores humanos y reales al niño de hoy, como la ética del hombre del mañana.

BIBLIOGRAFÍA
 La Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, promulgada el 7 de febrero de 2009.
Siñani, A. Pérez, E. (2010) “Ley N° 070” La Paz, Bolivia: Ministerio de  Educación. Estado Plurinacional de Bolivia.
Martínez, Roca (1984) “El criterio moral en el niño”. Barcelona.