“LA RUPTURA DEL ANTIGUO PARADIGMA
EDUCACIONAL Y LOS RETOS DE LA EDUCACIÓN POR COMPETENCIAS”
Por Rilda Ludmila Molina
Benavides.
El
presente artículo se fundamenta en el libro “DISEÑO CURRICULAR” Meza M. (2012).
“El
concepto y el uso del término currículo está claramente influido por las
diversas corrientes filosóficas, psicológicas y pedagógicas; por los adelantos
tecnológicos --especialmente por la incorporación de las tecnologías de la
comunicación al proceso enseñanza-aprendizaje--, por la constante transformación
y evolución de las sociedades, y por su movilidad cultural. De manera
consecuente podemos hablar de un currículo basado en enfoques críticos,
institucionales y constructivistas, aunque también en el currículo basado en
competencias” Tabon (2013).
La
educación basada en competencias representa un reto en la educación superior,
pues implica un cambio de paradigma que exige un alto nivel de compromiso a los
actores involucrados (diseño curricular, plan de estudios, planta docente,
etc.).
El reto es todavía mayor cuando se busca implementarlas en las aulas del
diseño, pues en éstas ha sido difícil la estandarización de los sistemas de
evaluación, al estar implicados generalmente con juicios de valoración
subjetiva a los que el alumno tiende a apelar para asegurar una buena calificación.
Estamos
totalmente de acuerdo con la afirmación de que “La articulación curricular, por
más oportuna y acertada que resulte, no será eficaz ni eficiente si no arriba a
las aulas o si su instrumentación carece de coherencia con las prácticas
docentes.
Esta situación obliga a propiciar y fortalecer la adecuada relación
entre el currículo y la actividad del maestro. Adecuación que sólo será posible
a partir de mecanismos pertinentes de formación, actualización y asesoría docente.
Así, al emprender la articulación curricular, la búsqueda de pertinencia entre
las prácticas docentes y el currículo será asumida como una de las principales
tareas a realizar.
Sabemos
que las dimensiones de la educación trascienden lo que sucede dentro de los
planteles, involucra no solo a las personas que participan del fenómeno de
instrucción formal, retoma de cada uno (alumnos, docentes, padres de familia),
como hemos visto, el currículum no se reduce a un listado de contenidos, se
encuentra también la tarea pedagógica, las actividades escolares y
extraescolares, el contexto, y muchos elementos más, que lo impactan, lo
queramos o no.
La
verdadera transformación social debe ser tejida en el aula, en la transmutación
de los pequeños espíritus que nos han sido encomendados. No puede por tanto
haber un verdadero cambio social que no se geste en el interior de las aulas,
so pena de tener cada vez más una sociedad no educada, lamentablemente, en
todos los sentidos. Si estamos conscientes de que algo no está operando bien en
la educación.
BIBLIOGRAFÍA
BALL,
S(1987), "Ortodoxia y alternativa, en: La micropolítica de la escuela,
Paidós/MEC,
Barcelona,pp. 19-44.
CONTRERAS
DOMINGO, JOSÉ (1994), "El profesor ante el curriculum. Argumentos para la
acción" en: Enseñanza, curriculum y profesorado. Akal, Madrid,
pp.225-243.
ZABALZA,
M (1988), "Evaluación de necesidades" y "Análisis de la
situación", en: Diseño y
desarrollo curricular, Morata, Madrid, pp.62-82
Análisis
y perspectivas de la reforma educativa
Memorias
y resolutivos, julio 2013. Coordinadora Nacional de Trabajadores de la
Educación.
Julio 2013